Destino: Phaion [Angel]

La inquisidora alzó su espada y la posó en tu hombro, rozando suavemente tu cuello. Presionó un poco, hasta que un hilo de sangre mancho el filo. Todo tu cuerpo temblaba bajo la presión de la espada. Y más aún viendo que la expresión de la mujer no cambiaba en absoluto.

Primero atacas y luego intentas engañarme con sucios discursos ¿O es que acaso buscas confesión antes de morir? ¿Buscas redimir todos tus asesinatos? Porqué Dios es piadoso y si purificas tu alma en la hoguera sin rechistar te dejara un lugar en su reino.

La mujer siempre hablaba con el mismo tono, neutro y sin sentimientos. Su mirada no había cambiado en ningún momento y su pulso no le temblaba ni los más mínimo. Parecía no tener sentimientos.

¿Qué me dices? ¿Te entregas a la pira?

Estaba temblando, mis rodillas lo demostraban...

Oíme, sólo he cometido dos asesinatos... y ambos fueron para salvar el pellejo que quieres quemar... Jamás me he jactado de ellos...

Mi angustia era evidente, no me importaba si moría ya, si tenía que confesarme, lo haría ahora y si me iban a quemar, estaría en silencio

Si te he atacado, fue precisamente porque pensé que tú también lo harías...
A decir verdad, esa es la verdadera justicia... Castigar al que obró mal y premiar a aquél que vela por el bien. Tú me crees un demonio, pero no sabes cuánto he velado... cuánto me he sacrificado por los demás... De hecho, ni siquiera he robado en toda mi vida, tampoco miento... mis discursos están limpios... y mis asesinatos no necesitan ser redimidos, pues están justificados... Y Dios es piadoso, pero tiene nada que perdonarme a mí... jamás le he ofendido, pues sigo firmemente claras pautas en mi vida... pautas que Él mismo ha ordenado a su pueblo...

Si decides quemarme, tendrás que ir a confesarte...
Ya te he dicho, y lo sostengo... soy una persona que obra para el bien... y soy buscado por intentar sobrevivir, por no querer morir... y no quiero morir, precisamente porque tengo mucho para dar... sé que puedo actuar en algunos aspectos que beneficiarán a los que me rodeen, y al mundo... Soy un trabajador... y no descansaré hasta el día en que muera, ya que mi trabajo enorgullese al Señor.

Si decides quemarme, matarás a un trabajador de Dios, a alguien que podría haber salvado a un niño indefenso o ayudado a una anciana con sus quehaceres, o plantado un bosque...


La miré, mi mirada decía mucho... y la suya, nada
¿Cómo puede ser tan fría?

No sé qué es lo que te ha ocurrido para que seas tan fría... pero sinceramente lo lamento... y si me lo permites, estaría encantado en ayudarte... sea lo que sea... ayudarte a llevar una sonrisa al rostro, o simplemente una mueca de felicidad, o de emoción...

Pero si decides asesinarme, no sólo no podré hacerlo, sino que tampoco podré seguir obrando para el bien... y tú...

Suspiré, estaba tratando de normalizar mis pulsaciones

Tú tendrás que dar las explicaciones cuando llegues a Su Reino: Pues habrás matado a uno de sus milagros...
Crees que soy un demonio, pero ellos usan su poder mara hacer el mal...¿Acaso no notas la diferencia?

Bonito discurso. Me gusta tu metodología demonio. Primero intentas matar a traición, luego intentas convencer con palabras vacías e inútiles. Por suerte te has topado con una persona piadosa, te voy a dejar vivir por el momento. Mereces un juicio justo.

Como siempre la joven inquisidora habló sin mostrar un solo rastro de sentimientos o compasión en su voz. Su mirada continuaba clavada en tus ojos, como si no le costara ni lo más mínimo sostenerte la mirada en todo momento. En cambio, a ti te resultaba bastante incomodo fijar la vista en sus verdes ojos.

La inquisidora dio unos cuantos pasos, los suficientes para colocarse en tu espalda y colocar la punta de su espada en tu espalda.

Caminando Angel, voy a llevarte al calabozo. Por cierto, mi nombre es Meryl.

Meryl, llévame, seré juzgado. Te pido que hasta ese momento, te gurdes eso de llamarme demonio... no lo soy

Empecé a caminar, siguiendo sus indicaciones

Más le vale a este pellejito ser entendido o no habrá más Ángel en este mundo

Caminaba cabisbajo, repitiendo las frases de las cuales estaba convencido.
Estaba preparado, no tenía nada que perder, más que mi vida... de ganarla, la dedicaría a lo que me enviaron a este mundo. Si la pierdo, empezaré otra vez en otro lugar.

Mi corazón galopada pisoteando mis pensamientos
Estaba más nervioso que en esa posada...

Meryl te llevó por las calles de Torda, pudiste notar que tomó calles principales, seguramente buscando que todo el mundo te viera. Que vieran como había capturado a otro "demonio" como los que habían armado todo aquel revuelo. La gente te miraba con desprecio y te lanzaba tomates, lechugas y frutas varias. Te llenaron la cara, el pelo y la ropa de trozos de fruta y hortalizas. Te insultaron sin piedad, diciendote de todo e incluso llegaron a lanzarte piedras. Más de una te impacto en las costillas y en la cara.

Y no podías hacer nada más que avanzar. Tu captora seguía con la punta de su espada clavada en tu espalda, cualquier movimiento, cualquier poder podría significar la muerte. Había detenido tu impacto telequinetico, no podías saber hasta donde llegaban sus poderes.

¿Te esta gustando el paseo, Angel? preguntó la inquisidora. En su voz no había burla, ni mofa, ni rencor, ni odio. No había nada.

Y tú no podías sentir más que impotencia.

¿Es lo que merezco por haber nacido?

Caminaba con la mirada hacia abajo, como si aceptara aquella humillación como una crítica consturctiva, como si no me importara. Y en realidad no me importaba, ya estaba todo perdido. Si éste era mi destino, no soy el Ángel que creí que era.


Si tienes algo planeado para mí, es un buen momento para llevarlo a cabo
Le "dije" a mi propio Di-s

Supongo que no me queda más que mi Fé para jactarme

Tras el largo paseo, que duro más de una hora, llegasteis a una pequeña fortificación que se alzaba al lado de las murallas de la ciudad. En sus altas torres ondeaban banderas con los tres cuervos dibujados en su centro, el símbolo de Moth. A pesar de tu lamentable estado pudiste fijarte en que cuatro guardias vigilaban la entrada, los que había en las almenas no pudiste verlos.

Pasasteis la puerta que los soldados abrieron a vuestro paso con una reverencia a la joven inquisidora. El interior era oscuro pues los vanos no dejaban pasar bien la luz y los muros eran demasiado gruesos. Las paredes y el techo estaban sumamente recargados con gárgolas y otras figuras que se te antojaban demoniacas. En aquel salón había todo un contingente de guardias, muchos sentados jugando a los dados, otros charlando...

Pero vuestro camino siguió hasta unas escaleras que bajaban. Os llevaron a un largo y estrecho pasillo llenó de puertas de madera cuya única abertura era una pequeña ventana. Meryl te llevó hasta la más alejada de todas, en tu camino pudiste ver que había cuatro guardias vigilando el pasillo.

Con un empujón entraste en tu celda, era estrecha, sucia y estabas solo en ella. Al otro lado tenía una rejilla de madera que daba a un segundo pasillo lleno de más celdas y con otros cuatro guardias.



Espero que disfrutes de tu estancia. Pronto será tu juicio.

Lo ansío, pues alguien como yo, en lugar decorado con gárgolas y símbolos demoníacos, no es lo correcto...

Me senté en la letrina.

Cuando se demuestre quién soy, ¿querrás quemarme de todas formas?
¿Esto es por tus compañeros, que lamento haberte quitado, o realmente me crees malvado?

Me costaba creerlo, debía ser una resentida...

Yo no le hago mal a nadie!! Al contrario!!!

Eres un demonio, antes lo has demostrado. Pero la verdadera razón por la que he estado persiguiendote es por que mataste a mis amigo, a mi familia. No se como lo hiciste, alguien tan inútil como tú. Pero lo hiciste y ahora pagaras por ello.

Por primera vez la voz de Meryl mostró sentimientos, la ira y la rabia bullían en su garganta aunque trataba de controlarlo. No te dirigió más palabra, cerró de un portazo la ajada puerta de madera. Daba la sensación de que iba a romperse, pero se mantuvo.

Y entonces se hizo el silencio. La luz era escasa, lo único que oías eran gemidos que provenían de otras celdas o los pasos de los guardias en el pasillo. La soledad te abrumó y te estrujó el estomago con su fuerte puño de hierro.

Sentado como estaba, me decidí esperar a que algo ocurriese.
Estaba muy dolido para actuar. Estaba encerrado otra vez, con la amarga imagen de Kenke y Kazuma apaleados. Había otros presos, sentí deseos de ayudarlos, pero:
No puedo ayudarme ni a mí mismo... cómo se supone que...
Me incorporé y me acerqué a los barrotes.
Hey! dije en un susurro forzado Hey! Mi voz era apagada, no era necesario que se escuche en toda la sala...
¿Están acusados de demonios?¿Hace cuánto están aquí?

Realmente quería liberarlos, liberarme...si me ponía a profundizar, debía "liberar" a cada uno, presos o libres, de sus ataduras inútiles

Aquí no hay nada que pueda hacer, hay guardias por todos lados...
Esperaré mi juicio, y si me consideran demoníaco, pues ahí tendré que escaparme...y volver luego, o podría...
Concentro durante un minuto para "Destrozar" la cerradura de la celda aledaña
Tirada de Potencial: 70base + 40conc + 73dado = 183 +Desequilibrio Psíquico = 240
Casi imposible, 140 RF

Comienzo a concentrar nuevamente para intentarlo con mi propia celda

Eres libre, hermano, intenta no llamar a los guardias mientras libero al resto y si vienen, avisame

No puedo dejar que se note qué estoy haciendo o me matarán sin piedad

Te recorrió una extraña sensación al intentar comunicarte con alguien a quien ni siquiera podía ver. Ni siquiera sabías si había alguien en las otras celdas. Las que tenía enfrente contaban con la puerta con una ventanita cerrada como único medio de ver. Y las de los lados eran reja como la parte trasera de la tuya, pero de poco servía pues no podías ver a tus vecinos. Nadie contestó a tus preguntas.

Tirada por advertir de los 4 guardias: Secreta

Ninguno pareció darse cuenta, al menos eso parecía. Entonces la cerradura de la celda a tu lado reventó con un golpe sordo. De ella salió un hombre esmirriado y ajado. Era viejo y parecía estar muy mal nutrido. Lucía una frondosa barba de al menos años y sus ojos denotaban que no estaba muy sano mentalmente.

LIBRE gritó por el pasillo SOY LIBRE comenzó a correr por el pasillo todo lo rápido que pudo, solo para toparse con los cuatro guardias y que lo devolvieran a la celda tras una brutal paliza.

Uno de los guardias cerró la puerta de tu vecino y comprobó que no se cerraba

Que curioso, la han reventado.

Tragaste saliva con fuerza. Era momento de actuar antes de que comenzaran a investigar quien había hecho aquello.

¡Viejo inútil! ¿Qué le costaba ser discreto?
Tenía que actuar, si me atrapaban, me matarían...
Si actuaba y no lo lograba, me matarían...
Empleo 1 CV para aumentar mi "Presa telequinética"
Tirada de Potencial: 70 base + 20 CV + 57 dado = 147 + Desequilibrio Psíquico = 180
Fuerza 12 / Radio 5 metros. De lograrlo, mantengo innata la Presa

Más me vale tenerlos quietos y poder concentrarme en esta celda...

Y si salgo, ¿Qué hago? no puedo irme y dejar al resto aquí... y no puedo salir caminando por la puerta seguido de diez prisioneros...
Si pudiera conseguir algún uniforme, quizá tenga una oportunidad...
O podría intentar hacer un hueco en la pared y soltar a los presos... seguramente sean apaleados, pero sigue siendo una oportunidad... como mucho después podré colarme por el mismo hueco y liberarlos... y yo podría salir con un uniforme aprobechando la distracción

Estaba confundido, ninguna era segura. Y el dolor en mi pecho no amainaba...


Debo intentarlo y si muero, moriré intentando

Tiradas pertinentes realizadas

El guardia que había descubierto lo de la cerradura cayó al suelo retorciendose, intentando librarse de tu presa. Otro intentó correr a socorrerle pero también se fue de bruces al suelo bajo tu yugo telequinetico. El tercero y el cuarto desenvainaron las espadas y corrieron a por sus compañeros. Uno se detuvo un poco en su carrera, pero no estaba lo suficientemente paralizado. El otro escapó de tu poder sin darse cuenta.

¿Qué ocurre? preguntó el que estaba libre. Su voz estaba alterada pero pretendía mantener la calma y la compostura.

El paralizado intento contestar a duras penas algo que no entendiste.

¡¡Alarma!! ¡¡Alarma!! comenzó a gritar el guardia libre.

Era el momento

Ayúdame con ésto

Tirada de Potencial para "Balística" con las espadas de los propios guardias (dándole prioridad al que está de pie, usando primero su arma, y atacándolo a él): 70 base + 52 dado = 122 + Desequilibrio Psíquico = 140 Fuerza 10 / Hasta 5 Kg

Tirada de Proyección: 105 base + 16 dado = 121

Debo matarlos, lo detesto, pero no concibo otra oportunidad... si debo vivir exiliado, huyendo, para poder desarrollar mis teorías, para continuar ayudando a éste mundo, lo haré.

Asomado apenas para mirar, envié sus espadas a por su sangre. Debía ser veloz y certero, si daban la alarma, nunca saldría de allí.

Y si no lo lograba, todavía existe la posibilidad que se la ensañen con el viejo... yo tengo que pasar desapercibido, si alguien se acerca a mi celda, me verá en posición de oración, como si estubiese rezando, o redimiéndome con el Señor.


Busqué en mis bolsillos, por alguna razón, Meryl no me había quitado mis pertenencias... ni siquiera mis armas...
Voy a guardar estos cuchillos para el último momento

Comienzo a concentrar para "Telequinesis Orgánica", aplicandola a los cuerpos de los guardias que continúen vivos

Hasta tú mismo te sorprendiste del alcance de tus poderes. Todos habían muerto, los cuatro. Empalados por sus propias espadas se desangraban en el suelo. Por desgracia no habías podido evitar que uno de ellos diera la alarma, pero por ahora no oías a nadie bajando por las escaleras ni nada parecido.

Era tu momento de escapar, pero entonces te diste cuenta de que para escapar por el pasillo que habías dejado vacío ibas a tener que reventar toda la malla de madera que había tras el lavabo. Pues no era una puerta, si no una pared.

Unos cuantos presos comenzaron a gritar mientras pensabas en todo aquello. Muchos parecían lunáticos, otros te pedían ayuda para escapar. Pero con todo aquel jaleo era probable que atrajeran a alguien. ¡Tenías que actuar rápido!

Examiné a fondo el campo visual que me permitían los barrotes.
Entre los presos, había de todo y estuve unos instantes estudiando cuál me parecía el más centrado... Había varios que me pedían ayuda.

Intenté una Comunicación Mental con aquél que pareciera más inteligente, o calmado... la verdad es que en ese momento de tensión, no me era fácil distinguir.... Quería salvarlos a todos... el cómo era el problema
Tirada de Potencial para Comunicación Mental : 70 base + 05 dado + Desequilibrio Psíquico: 80

Oye, te liberaré, coge una espada y vuelve a tu celda. Si hacemos esto bien, puede resultar... también ayúdame a calmar al resto, dado que llamaran la atención de más guardias. Sé discreto, no como aquél viejo, no vayas a salir corriendo, ni a gritar... simplemente coge una espada y prepárate... tampoco denotes que fui yo... necesitamos el efecto sorpresa, necesitamos suerte e ingenio, necesitamos todo, TODO. ¿Puedo confiar en tí? puedes contestarme de esta manera Mantengo Innata la Comunicación

No podía hacer esto solo. Necesitaba un aliado
¿Orfeo se habrá enterado?

Mi corazón no podía ir más rápido.. mis manos sudaban, mis ojos estaban fijos en la celda de mi confiado... iba a destrozar su cerradura cuando se me ocurrió:

Busqué con la mirada sobre los cuerpos de los guardias... debían tener llaves... si no, ¿Cómo pensaban encerrar al viejo?
Si podía encontrar esas llaves, todo sería más simple

Tirada de Buscar: 65 base + 52 dado = 117

Miraste desesperadamente los cadáveres. Allí estaban, en el cuerpo de uno de los soldados, las llevaba atadas en el cinturón. Era imposible alcanzarlas con la mano, ni si quiera tu reciente compañero llegaría. Entonces algo sonó en tu cabeza.

¿Qui... quién... eres? ¡¡¿¿Como hablas en mi cabeza??!! ¡Sal de mí!sus gritos resonaron por tu mente. Era lógico que alguien normal se asustara de aquello. La gente normal no creía ni conocía que había poderes más allá de su comprensión y gracias a la influencia de la iglesia, estos eran considerados demoniacos.

El hombre con el que te habías comunicado se había echado las manos a la cabeza y había caído de rodillas.

Tranquilo, no voy a hacerte daño... de hecho estoy intentando sacarnos de aquí... si me ayudas, se puede hacer, pero solo no podré... Rápido, haz lo que te dije y sé discreto, o nos apalearán


Empleo mi último CV para utilizar "Destrozar"
Tirada de Potencial: 70 base + 80 dado = 150 + Desequilibrio Psíquico 180

¡Vamos, necesito un aliado! Pensé para mí.
Estaba desesperado. Intenté acercar las llaves, pero mi mente estaba muy ataereada ya, no podía hacer más.

Me senté en el piso. Estaba exausto.

Las red de madera de una de las celdas estalló en pedazos. El asustado preso que habías elegido como compañero salió de ella agachado, su rostro denotaba pánico. Viste como corrió hasta el cadáver de uno de los guardias y arrancó la espada clavada en su pecho.

Viste como en su rostro se dibujó una sonrisa y entonces oíste lo que pensaba.

Gracias Dios, te prometo que iré a misa todos los domingos.

Tu rostro se tornó un poema tras oír aquello. El preso se creía que era Dios quien le hablaba.

Entonces te diste cuenta de que tus manos estaban sudando a raudales. Tu cabeza te daba vueltas y el corazón te iba a mil por hora. Una presión golpeaba contra tu cabeza y no te dejaba pensar. La comunicación mental desapareció y comenzaste a marearte. Tu cuerpo había perdido completamente el control, entonces te diste cuenta de un factor importante. Estabas encerrado, tu claustrofobia estaba atacando.

Había llegado mi hora.
Las paredes estaban cada vez más cerca, la vista se me había nublado, intenté incorporarme y luchar por la Libertad y el Amor de los presentes. Luché por seguir existiendo.
Volví a caer, esta vez sobre mi pecho. Mis brazos luchaban por levantar el cuerpo que me encerraba.

No puedo, soy débil

Debía levantarme y luchar por los ideales que me habían alcanzado, por los principios del Amor-Tierra. Por la libertad.
Pero no pude, mi cuerpo era débil.

Tirada de potencial para Forma Astral: 70 base + 93 abierta + 52 = 215 + Desequilibrio Psíquico : 240.

No sé si fui yo, o si "Ellos" lo hicieron por mí, pero ahora era libre.



FDR: DJ

FDR: Si no te quedan CV´s no sé como usas Forma Astral. Aparte de que esa abierta milagrosa es bastante... dudable. Así que voy a tirar yo por tí.

Potencial para Forma Astral: 02 Dado = Pifia. Tirada para calcular el nivel de pifia=-82
Son 8 de Fatiga. RP contra 100 = 31 dado + 50 base = 81. Fallo de 19 puntos = 19 días en coma.

Intentaste usar algo que estaba totalmente fuera de tus posibilidades. Algo que superaba tus limites, pero ¡Lo habías conseguido! Te sentiste libre y tanto que te sentiste libre, tu cadáver se estampó contra el retrete partiendose el cráneo. El bater se partió y la mierda salió a borbotones esparciendose por encima de tu cuerpo inmóvil.

Al parecer no habías conseguido la forma astral, simplemente habías muerto y tu alma estaba fuera contemplando como había muerto tu forma física.

Pasaron unos minutos de caos y confusión en la prisión, finalmente la rebelión fue sofocada y los guardias comenzaron a inspeccionar celda por celda. En la tuya entraron un par de soldados que se alarmaron al ver tu cadáver.
Pero la cara de susto se les quitó pronto, cerraron la puerta y comenzaron a hablar mientras se desnudaban.

Bff, yo llevo mucho tiempo sin hacerlo, esta es la ocasión perfecta

Y que lo digas

Los dos guardias cogieron tu cadáver y lo violaron por todos los orificios posibles. Y llenaron tu cuerpo de fluidos. Tras ello se vistieron y se marcharon con una sonrisa de oreja a oreja.

Parecía que allí acababa tu aventura. No podías adivinar que juego macabro os había unido a Kenke, Kazuma y a ti para mataros horas después de haberos conocido.

El mundo era una mierda, como la que te salía por las orejas.

Fin de la partida.